Tm - Cronica...

MIS PRIMEROS DIAS....
Por: Oriana Zapata

La primera vez que jugué en un torneo metropolitano, fue hace ya 5 años en el 2002. En aquellos días apenas Mauro O. se las ingeniaba para poder conformar un equipo femenino en la ciudad y bueno yo hacía parte de ese pequeño grupo de niñas novatas que entrenábamos con otros 3 equipos en una misma cancha de la UdeA, pues Kwata contaba con otros semilleros Masculinos: la A, la B, y la D (actuales Suricatas). No todas eran novatas, Sandra David ya jugaba, junto son Laura, Aleja, Paola y Cata la gata, ellas jugaban y entrenaban con los de la A de Kwata y Absolut, El toreno de ese año se jugó mixto pues todavía no había de donde hacer un torneo femenino en la ciudad, .y se dividió dos categorías: de 7 y de 4

Yo por mi parte jugué con la D y todavía recuerdo el primer partido, nada que hacer goleados al enfrentarnos a Kwata A, pero sin embargo no me sentí mal, pues aquellos torneos se caracterizaban por el entusiasmo y la alegría de parcharse a jugar, todavía sin uniformes marcados jugábamos en las canchas de la nacho, llenas de pantanos y charcos, todos hacíamos una fila frente al charco y el Chorri nos lanzaba el disco, todos corríamos a “intentar volar y agarrarlo” antes de que cayera, pero la verdad era que disfrutábamos empantanarnos, reírnos, y volver a intentarlo. La mayor parte de los días del torneo llegaba a mi casa empantanada de pies a cabeza y no era precisamente por volar en los partidos (por esos días lo veía casi imposible de lograr) sino, era más bien que no me perdía esos juegos al final de la jornada.

Durante estos partidos aprendí muchas cosas, de los grandes maestros como Mauro O., pero también del Punky, Pablo Azul, El Chorri y el Pircing quienes siempre me explicaba como debía mejorar mi lanzamiento, como volar, etc etc. Este fue, si mal no recuerdo, uno de los más largos torneos, pues lo empezamos a jugar a principios o mediados de marzo si no me falla la memoria y bueno lo terminamos como en octubre en una acampada de premiación en el Retiro.

Mi equipo no ganó nada, o bueno materialmente hablando, pues la experiencia y el amor por este deporte se nos fue metiendo poco a poco en nuestra alma. Y quién de esos días no recuerda la acampada pasada por un aguacero!!, el frío del amanecer, el charco en las carpas, las locuras de ricky, en fin… al Torneo Metropolitano y a Kwata les debo el amor por el Ultimate, de allí nació mi equipo del alma, Kwata Femenino en un principio y luego Yerbabuena, a todos los que conocí en mis primeros día de juego les debo muchas cosas y poco a poco se han ido estrechando esos lazos que nos unen como compañeros de juego y amantes del disco.

A mi mejor amigo “Piercing” le debo el haber conocido el ultimate, no tengo ni tendré con que pagarle, el sabe que se lo agradezco desde le fondo de mi corazón. A Mauro mi primer entrenador, le debo la paciencia y lecciones que nunca olvidaré. A Laurita la amistad y confianza. A mi capi, Sandra David la dedicación y entrega incondicional. Pero también a todos los que he conocido fuera y dentro de la cancha.

El Torneo Metropolitano ha sido ese espacio para aprender de los otros, de mis rivales y compañeros, pero también ha sido ese espacio que nos ha hecho crecer como comunidad

Muchas Gracias

Oriana (Diabola)